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Dr. Santos Martín

  • Licenciado en Medicina y Cirugía en la Facultad de Valencia.
  • Doctorado en la Universidad de Tübingen (Alemania).
  • Estudios de especializaciónen oncología en Suiza y Alemania, así como de Medicina Familiar y Comunitaria en Barcelona.
  • Máster en Homeopatía, Medicina Medioambiental, Medicina Natural y Ozonoterapia.
  • Profesor en másters universitarios en las facultades de Valencia, Barcelona, Granada y Madrid.
  • Profesor investigador en la UCAM d Murcia.
  • Miembro de la Sociedad Europea de Hipertemia y de la Sociedad Oncológica Alemana.
  • Ponente en congresos nacionales, europeos y mundiales.
  • Investigador en oncología y concretamente en en las rutas metabólicas de los tumores y la acción de los radicales libres, como mensajeros, dentro de ellas, y los efectos de la fiebre activa y pasiva, sobre los mecanismos inmuno/metabólicos en cáncer.
  • Actualmente dirige un centro médico privado (Clínica Dr. Santos) en Granollers (Barcelona).

Comprensión del metabolismo. Esencia de la oncología personalizada

El abordaje de la patología oncológica precisa que conozcamos, desde el primer momento, cual es la situación que tiene pues los tratamientos desde la medicina integrativa, a diferencia de la oncología convencional en donde rige con frecuencia el concepto ¿Cuánta dosis puede aguantar el paciente? Sobre todo, en lo referente a la QT, en la integrativa debemos tener siempre en cuenta ¿Qué capacidad de respuesta tiene aún el paciente? Esto está condicionado por tres aspectos fundamentales:

1. Estado físico del paciente y patologías previas al cáncer.

2. Grado de extensión del tumor.

3. Terapias previas realizadas.

El segundo aspecto para considerar y que debe tenerse en cuenta a la hora de preparar un procedimiento terapéutico es: desde el conocimiento de la patología existente y estado del paciente, el tratamiento que aplique tendrá la finalidad: curativa, de contención o paliativa. Cada uno de estos procedimientos tiene abordajes terapéuticos diferentes que exigirán más o menos del paciente.

La combinación de los tratamientos integrativos durante la aplicación de los convencionales también debe integrarse como una unidad y, desde mi punto de vista, el tratamiento que marca la intención procedimental debe ser el más agresivo y pondremos, de entrada, la parte integrativa al servicio de la convencional.

Sobre todo, cuando el paciente está en tratamientos de contención y/o paliativos debemos ser muy cuidadosos para evitar que, la posiblemente corta vida de la que dispondrá, no la dedique a hacer terapias, en la mayor parte de las veces absolutamente inútiles (y en muchas ocasiones muy caras), que les impide tener una aproximación adecuada a la muerte y sus consecuencias en todos los aspectos en el que el ser humano está involucrado. Evitar a toda costa la famosa y trágica frase de “el tratamiento un éxito, el paciente un fracaso”.